Los Ángeles, 4 mar (PL) El éxito rotundo de Coco en los cines de toda América permitía avizorar el triunfo en la 90 ceremonia de los Oscar, hoy ese premio cierra un ciclo brillante para esta obra de valores humanos entrañables.
La película de Pixar centra su argumento en la cultura mexicana a través de la historia de Miguel, un niño de procedencia humilde que viaja al mundo de los muertos para conseguir su sueño de convertirse en cantante.
Desde que la idea saliera a la luz en 2012 el filme dirigido por Lee Unkrich planteó un reto enorme para sus productores: crear un mundo de fantasía desde Hollywood basado en la celebración del Día de los Muertos, una de las más conocidas tradiciones folklóricas del país centroamericano.
Para ello los productores de Coco se trazaron una visión respetuosa de las costumbres y la realidad mexicanas que termina abordando temas universales y mensajes positivos como la solidaridad o los valores familiares.
Los avatares de Miguel para convertirse en un cantante famoso como su ídolo Ernesto de la Cruz, ※estrella de la guitarra y del cine inspirada en Pedro Infante y Jorge Negrete※ están llenos de guiños a las tradiciones de la nación azteca.
Según la prensa especializada, los recursos empleados rebasaron las cautelosas expectativas sobre cómo iban a ser retratados los mexicanos por sus vecinos norteños.
Desde el viaje a un inframundo ocupado por esqueletos vivientes, alebrijes, piñatas y pétalos de cempasúchil hasta el perro xoloitzcuintle que acompaña al protagonista, o las constantes alusiones a Frida Kahlo, Cantinflas, Agustín Lara o María Félix, Coco transmite mucho más que un argumento tradicional.
La cinta contó también con un elenco representativo de la nación centroamericana, mediante las voces de Gael García Bernal, Benjamin Bratt y el joven Anthony González para su versión en inglés.
Mientras que para el doblaje en español participaron el niño Luis Ángel Gómez, repitió García Bernal y el cantante Marco Antonio Solís interpretó a Ernesto de la Cruz.
Su éxito no se hizo esperar en taquilla, pues apenas tres semanas después del estreno, resultó la película con más ganancias recaudadas en México y la más vista en la historia de la nación azteca.
Luego de su estreno en el Festival Internacional de Cine de Morelia en octubre de 2017, Coco arrasó los índices de audiencia en Estados Unidos, Canadá y Latinoamérica, consiguiendo 718.9 millones de dólares recaudados en el mundo y récords como una de las película más vista en Chile, Perú, Ecuador y Argentina.
Otro de los éxitos de la cinta llegó con el Globo de Oro como mejor película animada este año y las nominaciones en igual categoría y en el apartado de Mejor Canción Original en los tan anhelados Oscar.
Por supuesto era favorita en la recta final, pero tenía garantizado mucho más que la estatuilla de la Academia norteamericana tras haber conquistado la admiración de la comunidad latina por la manera original con que presenta lo más auténtico de una cultura ancestral.
Más que una versión foránea, el filme de Unkrich parece una reverencia sincera a la cultura mexicana desde el mismísimo Hollywood.
Coco, la reverencia de Hollywood a la cultura mexicana
Por Elizabeth Borrego Rodríguez